Lo confirmó el presidente de la Empresa, Horacio Marín, en declaraciones radiales. Regirá desde las 00 horas del 1° de Octubre en las estaciones de servicio de la marca. Además prometió que la compañía volverá a reducir el valor si los combustibles tienen una nueva baja a nivel mundial.
El presidente de YPF, Horacio Marín, confirmó que a partir de este martes 1° de octubre, los precios de los combustibles de la compañía experimentarán una reducción del 1% en las naftas y del 2% en el gasoil, respecto al precio de surtidor que pagan los consumidores. Esta medida, busca reflejar las fluctuaciones internacionales del precio del petróleo en el costo final del combustible.
En declaraciones a Radio Mitre, Marín destacó que, aunque la baja en el precio mayorista será del 4% en nafta y del 5% en gasoil, los consumidores verán solo una parte de ese ajuste debido a factores como impuestos y variaciones en el tipo de cambio. El reciente incremento del 1% en el impuesto a los combustibles también contrarrestará la rebaja.
El presidente de YPF hizo hincapié en la necesidad de establecer un nuevo pacto con los consumidores, afirmando que «YPF no tiene que subsidiar a los consumidores y los consumidores no tienen que subsidiar a YPF». Esta política busca evitar que los precios queden desenganchados de las referencias internacionales, algo que no se vio en Argentina durante más de 20 años.
Además, Marín expresó su agradecimiento a los usuarios por su lealtad durante los períodos de aumentos significativos en el precio del combustible. También criticó el alto porcentaje de impuestos municipales, que en algunos casos alcanzan hasta el 25% del precio final del producto, considerándolos injustos para los consumidores.
En relación a los proyectos futuros de YPF, Marín se refirió a la situación de Vaca Muerta y el acuerdo con la compañía Petronas. Aclaró que la decisión final sobre la participación de Petronas en el proyecto aún no fue tomada y que dependerá de la obtención de contratos de compra de gas en Europa y Asia.
Además, confirmó que el gas licuado de Vaca Muerta será exportado desde el puerto de Río Negro, lo que podría generar ingresos de hasta 30.000 millones de dólares para 2030, contribuyendo a la reducción de la pobreza en Argentina.